Cristo Jesús vino a esta tierra, dio su vida en la Cruz del calvario, resucitó al tercer día, y por su victoria, tenemos también tal victoria, porque estamos en él. Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel (Jesús) que nos amó. Romanos 8:37. Más adelante nos dice en 1 Juan 4:4; Hijitos, vosotros sois de Dios, y los habéis vencido; porque mayor es el que está en vosotros, que el que está en el mundo. Estamos en gran victoria por lo que Cristo Jesús ha hecho por nosotros.
Ahora, hay algo muy importante para que se desarrolle esta gran bendición en nuestra vida, y se encuentra bajo la segunda sombra. Salmos 91:1; El que habita al abrigo del Altísimo morará bajo la sombra del Omnipotente.
Es importante asegurar dónde se encuentra tu vida, cuál palabra llena tu corazón, ¿los ruidos del mundo, o la seguridad de la palabra de Dios? Donde sea que habites, en lo negativo o en lo positivo, siempre habrá resultados, buenos o malos. Hay que prestarnos y tomarnos de la mano de Jehová para que él nos guíe a pastos verdes. Él nos ayudará si estamos tomados de su mano. Dice en Isaías 41:13; Porque yo Jehová soy tu Dios, quien te sostiene de tu mano derecha, y te dice: No temas, yo te ayudo.
Cristo Jesús vino con el plan y el propósito de su Padre, para hacernos libres y reconciliarnos con él de nuevo. Lo podemos ver en las escrituras donde dice: ‘entró a la ciudad sentado sobre un pollino, y el pueblo puso sus ropas y palmas, cantando ¡¡¡Hosanna, Hosanna!!! Pero vemos que unos días después, levantaron puños y gritaban; ‘¡crucifícalo, crucifícalo!’ Oh, pero si satanás hubiera entendido lo que iba acontecer en unos días, nunca hubiera crucificado a Jesús. Mas hablamos sabiduría de Dios en misterio, la sabiduría oculta, la cual Dios predestinó antes de los siglos para nuestra gloria, la que ninguno de los príncipes de este siglo conoció; porque si la hubieran conocido, nunca habrían crucificado al Señor de Gloria. 1 Corintios 2:7-8.
Con el acto de morir y resucitar, Jesús nos dio vida para nacer de nuevo. Por esta razón, tú y yo somos nuevas criaturas en Él, y las cosas viejas han pasado, he aquí todo es hecho nuevo. 2 Corintios 5:17. Jehová nunca nos fallará, ahora nos ha abierto un escape de gran victoria. De manera que podemos decir confiadamente: el Señor es mi ayudador; no temeré lo que me pueda hacer el hombre. Hebreos 13:6.
Continuará..
Obispo E. Daniel Ponce, Apóstol
(Isaías 41:10)
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